Somos
Nuestra historia y
la leyenda del Cóndor
Dorado
Cuentan los antiguos que, en raras ocasiones, un gigantesco cóndor sobrevuela las tierras de Sagrada Familia. Si se le observa con atención al caer la tarde, cuando la luz tiñe de rosa las montañas, su plumaje dorado y cobrizo revela su leyenda.
Dicen que quien logra verlo, descubre que bajo sus alas la tierra guarda una riqueza secreta: la de infinitos y dulces frutos. Allí nace nuestro viñedo, bendecido por la magia del Cóndor Dorado.
Nuestra
Herencia
En el corazón del Valle de Curicó, Millaman honra su legado familiar iniciado en 1946 por José Canepa en la histórica Hacienda El Cóndor de Peteroa. Desde este lugar cargado de historia, nuestra bodega mantiene vivas sus raíces, integrando tradición y tecnología en un espacio restaurado que respeta su esencia original.
Este compromiso con nuestra herencia da vida a vinos que expresan lo mejor del pasado y del presente, ofreciendo una experiencia auténtica y de calidad, fiel al espíritu de origen.
